Cuando el cocinero de un centro cristiano de
conferencias recibió un cumplido por sus panecillos
caseros, le dijo al doctor Harry lronside: "Sólo
considere lo que se necesita para hacerlos. La
harina por sí sola no sabe bien, tampoco el polvo
para hornear, ni la manteca, ni los demás ingredientes;
sin embargo, cuando los mezclo todos y
los coloco en el horno, resultan justo como deben
estar. "
Hay mucho en la vida que parece insípido o
hasta malo, pero Dios es capaz de combinar los
ingredientes de nuestra vida de tal manera que
resulte algo bueno.
Libro:Digale a su corazon que palpite de nuevo.Dutch Sheets
miércoles, 17 de agosto de 2011
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario